Certain Women (Ciertas Mujeres)
Por Rubén Cusati
Sinopsis
Las vidas de tres mujeres se cruzan en un pequeño pueblo de Estados Unidos, donde cada una está intentando abrirse camino sin demasiado éxito.
Premios
2016: Premios Independent Spirit: Nominado a mejor director y actriz secundaria (Lily Gladstone)
2016: Círculo de Críticos de Nueva York: Mejor actriz secundaria (Michelle Williams)
2016: Críticos de Los Angeles: Mejor actriz secundaria (Lily Gladstone)
2016: Premios Gotham: Nominada a mejor película y nueva actriz (Lily Gladstone)
Trailer
Este film no tiene nada que ver con el anterior que comentamos (Papusza) y sin embargo tiene que ver más de lo que uno piensa: las dos son excelentes películas. Aquella es una gran superproducción con un trabajo fotográfico inigualable pocas veces visto, en cambio Certain women tiene un presupuesto reducido (se filmó en 16 mm) sin tanto despliegue pictórico pues no es vistosa pero que, sin embargo, compensa con ubicar la acción en el invierno al Norte de USA en pequeñas poblaciones.
Otra cuestión que las iguala reside en que no han sido estrenadas comercialmente en nuestro país y, la que nos ocupa, fue directamente a la plataforma Qubic. Resulta entonces que las grandes películas no le interesan a los distribuidores que intuyen que tampoco le interesan a los espectadores no sólo argentinos, pues esto sucede también en otros países como España, atiborrados del maistream cinematográfico proveniente de Hollywood.
Las conecta además la narración que se aparta de la clásica “presentación, nudo, desenlace”:
Certain women consiste en tres historias independientes de mujeres. Esas historias se rozan apenas de manera visual pues acontecen en pequeñas comunidades de Montana, uno de los menos poblados de los Estados Unidos. que Reichardt filma con suma sensibilidad, con los ojos bien abiertos.
Como siempre en la filmografía de Kelly Reichardt coexisten elementos tradicionales del cine de todas las épocas: los trenes, los movimientos de un sitio a otro, las distancias largas, los autos viejos y los animales caballos, gatos y esencialmente perros, o más precisamente perras que se llaman Lucy. La película está dedicada a ese nombre, no sabemos si se trata de una perra o de una mujer. En una película anterior del 2008, Wendy and Lucy, adaptó un emotivo cuento de Jon Raymond con su actriz fetiche, Michelle Williams, y por supuesto Lucy.
La energía cinética que Reichardt imprime a sus personajes a través del movimiento y de los viajes se transforma en energía potencial contenida creando momentos de gran intensidad pero, que a diferencia de los melodramas rutinarios, lo que está por suceder…no sucede, abriendo al espectador un espacio para la reflexión y a los personajes a una acción que es independiente de los otros. La potencia del no, la potencia de ser. Se establece pues el principio fundamental de la tragedia, el romance, la venganza, el adulterio… pero nada termina de ocurrir, nada alterará la indolente rutina de los personajes, que quedarán a la espera del prometido cambio en sus potencialmente vacías existencias.
Desdramatiza con su estilo austero, minimalista y delicado, su ritmo pausado con tonos agridulces, tonos medios, las situaciones que amenazan transformarse en tragedias. Las protagonistas recorren las distancias que parecen insalvables no sólo por los kilómetros que deben recorrer sino por la incomunicación que padecen. Viajan en autos viejos y a caballo, se acercan, pero no pueden superar barreras invisibles. Esta historia nos demostrará la incapacidad de comprender los sentimientos del otro y de expresar los propios, siendo esta circunstancia más determinante para dificultar la comunicación que la propia distancia física en sí.
Las situaciones no se resuelven, todo permanece inalterado, o inalterable, ya sea para mejor o para peor. No hay cierres felices o dramáticos, tienen el estupendo sabor de lo inacabado como enseñaba Kiarostami.
La abogada de la primera historia (la extraordinaria Laura Dern, actriz fetiche de David Linch, hija del mítico Bruce y nieta nada menos que de Alan Ladd) lleva a otra ciudad a un obstinado cliente que quiere hacer una demanda. En la inter-consulta, el viejo abogado con una frase igual a la que ella le ha venido repitiendo al cliente durante meses, lo convence. “Me gustaría ser un hombre para que cuando hablara me dieran un ok inmediato”, dice Laura Ella se da cuenta que deberá vencer interminables resistencias y validaciones.
Gina (Michelle Williams, fetiche también, pero de la realizadora y protagonista de Wendy y Lucy) tiene un objetivo: adquirir unas piedras antiguas para la construcción de su nueva casa. En cortocircuito con su hija adolescente y emocionalmente distanciada de su marido, esas rocas arenosas se convierten en motor del movimiento. Aquí, el dueño de las piedras un pionero que las atesora, se dirige durante la negociación siempre al marido de Gina hasta que él le reconoce: ella es la jefa. Un pequeño avance respecto de la historia anterior y del machismo del siglo XXI.
La tercera historia es la rutinaria vida de una cuidadora de caballos que un día se aventura en la clase nocturna de Derecho de otra abogada, Betty (Kristen Stewart, la de Personal Shopper), que si bien vive a 4 horas de distancia aceptó el trabajo que nadie quiere para continuar con lo que estudió pues temía acabar en una tienda. Vi luz y entré le dice la ranchera (Premio Revelación) para quien Betty representa escapar de la soledad invernal y el nuevo mundo del deseo, quizás el amor. Cada encuentro en el frío restaurante de paso, sin embargo, mantiene la luz alrededor de ellas que la ranchera percibió cuando entró a la clase por primera vez.
Tres retazos de vida independientes que no parecen sentirse satisfechas o realizadas. Nadie les da una mínima muestra de cariño. Se han tenido que endurecer como símbolo de resistencia. Igual que los paisajes que Reichardt filma con delicadeza.
La conexión entre las historias se establece entre la frustración profesional de Laura, la incomodidad conyugal de Gina y la invernal soledad de la joven ranchera, en un mundo incierto en el que ser mujer es un estado alejado del sueño americano y rodeado de un implacable individualismo con la soledad de los personajes que es externa pero fundamentalmente interna.
Kelly Reichardt realiza, escribe y edita este filme de fotografía oscura, ambientado en un escenario natural y frío, con personajes secundarios hombres, perturbadores o nebulosos, y en primer plano mujeres puestas en situaciones de ansiedad, que intentan lograr al menos sus pequeños o grandes sueños y las acompaña dentro de amarronados paisajes de belleza desoladora apagados como sus propias vidas.
Las interpretaciones son como lo marca el estilo de la directora: neutras, contenidas, opacas, profundas y sentidas.
Ficha técnica | |
Título original | Certain Women |
Año | 2016 |
Duración | 107 min. |
País | Estados Unidos |
Director | Kelly Reichardt |
Guión | Kelly Reichardt – Adaptación relatos cortos de Maile Meloy) |
Música | Jeff Grace |
Fotografía | Christopher Blauvelt |
Reparto | Michelle Williams, Kristen Stewart, Laura Dern, Lily Gladstone, Jared Harris |
Productora | Film Science |
Género | Historias cruzadas |