Desconcierto es el nombre de la esencia,

que llena las formas que se pueden ver,

Confusión por no dejarse ni tocar

Tristeza de nunca poder comprenderla.

Somos los dueños del alrededor

¿Acaso si cierras los ojos por siempre,

vivirán las cosas como cuando estabas,

o dejarán de ser cuando apagues tu luz?

Somos los huéspedes de un esquivo anfitrión,

¡ o crees tal vez que te pertenece algo

además de tus preguntas y tus respuestas

y tu corta, muy corta porción de tiempo?

No se siquiera quien me dió la vida.

pero se que mañana deberé entregarla,

y mientras pienso en ese obtuso día,

sigo siendo porque puedo serlo.